Cocinando voy, tejiendo vengo... y en el camino....

Os estaréis preguntando dónde me he me metido todo este tiempo. Pues tejiendo, cocinando, con el primer trimestre de exámenes del cachorro humano y cambiando de departamento en la ofi.

Estresante, ¿verdad? Mucho, os lo garantizo. La sensación de el que mucho abarca poco aprieta era constante.
No me gusta sentirme así, no me gusta sentirme cansada, con ansiedad y viendo que mis proyectos de ocio se convierten en responsabilidades de quinto nivel porque la familia y las facturas son los primero.

Tampoco me gusta acudir a eventos, kddas de mayor o menor envergadura y ver que la crisis económica, el egoísmo y la competencia afloran las ruindades humanas en lo que debe ser un momento de asueto:

• Gente que va a degustar un menú y aprovecha para desprestigiar a un autónomo delante de 15 comensales porque… no sabe llevar su negocio y yo lo haría mejor.
• Gente que te embarca en supuestos actos sin ánimo de lucro y que luego descubres que sí había beneficio o incluso gastos cubiertos que nadie te dijo (¿por qué mi gasolina es gratis y los taxis de otro no?).
• Gente que celebra cumpleaños de amig@s y te excluye, olvidando que te dejaste horas por grabarle todas las temporadas de su serie preferida para su propio cumple.
• Gente que conmemora aniversarios y excluye a personas de la celebración delante del resto.
• Gente que se distribuyen las plazas de un evento jugoso, hablando en bajito por las esquinas y erigiéndose en una élite de no sé muy bien qué. 

Yo pensaba que los tiburones se circunscribían a las grandes empresas, pero he visto rapaces convertidas en carroñeras por un patrocinador, un banner más o una clase en una academia o taller.


Y para ello voy a unificar todos mi blogs bajo un solo paraguas, bajo un solo dominio: ¡este! Si bien es un blog de los más recientes, también es el más escondido en la red.

Pero no escribo para ganar adeptos, escribo porque me apetece compartir. Lo bueno de la red es la oferta tan variada que aporta a nuestro día a día. Si decides seguirme, si decides leerme de cuándo en cuándo, bienvenido a mi micro-mundo. Si por el contrario, te resultolskd*@las*if//ñalwrih, no pasa nada: hay otros contenidos en la red que te gustarán más.

¿Voy a seguir cocinando?¡Definitivamente sí! ¡Pero si lo hago a diario y no friendo un huevo, precisamente! Y ¿cómo no publicas tus recetas a diario? Muy simple, erré en el formato. Me lleva más tiempo preparar las fotos con marca de agua, ajustarlas a su tamaño, subirlas a flickr, maquetarlas en el post, redactar el texto de manera clara, sencilla y amena, que cocinar. Alucinante, ¿verdad? Así que, a partir de ahora, la carga de imágenes se va a reducir y sólo aparecerán en aquellas ocasiones que de verdad aporten un algo especial.

¿Voy a acudir a eventos? Pues esto ya dependerá de si cuentan o no conmigo. Claramente no soy una blogger gastronómica de primera línea pero si hay un sitio para mí y un hueco en mi agenda laboro-familiar, claro que acudiré y os lo contaré. Tengo en la recámara muchos que no he sacado por este periodo estresante y de reflexiones que finalizo ahora.

¿Voy a acudir a cursos?¡Un sí rotundo! Sí pienso seguir aprendiendo, asistiendo a cursos de cocina, de labores, de manualidades y lo compartiré desde aquí. ¿Os habéis fijado que tenemos nuevas pestañas para secciones?

Entonces, ¿qué pasa con los otros blogs? Les invito a visitar desde ya este y a seguirme por mail o como vengan haciéndolo habitualmente. Con el año nuevo o si veo que se pasan desde hoy a este, redirigiré automáticamente a la zona que corresponda.